11 octubre 2022
Cinco preguntas sobre los animales albinos a nuestro guía Laizer
Como ya anunciamos la semana pasada, el avistamiento de animales albinos en Tanzania ha aumentado considerablemente en los últimos meses. Josep Abel Laizer, un guía de safaris que forma parte del equipo de Tanzania Specialist en Arusha, afirma que durante el último mes se han reportado varios encuentros: «Hace unos días, un compañero de trabajo vio una jirafa albina en el Serengueti, y hace dos semanas, otros vieron a una cebra albina en la zona norte del mismo parque. La semana pasada, yo mismo vi a un babuino albino con su cría no albina en el Parque Nacional de Arusha, y, no hace mucho, un grupo de visitantes vio un búfalo blanco en Tarangire».
En esta entrada de nuestro blog, hablamos un poco con Laizer para aprender más sobre su vida como guía de Tanzania Specialist y sobre los recientes avistamientos de estos animales tan peculiares.
Acerca de Laizer
Laizer nació y se crio en la región de Arusha (Tanzania), como miembro de la tribu masái, algo de lo que se siente muy orgulloso. Creció en la aldea Monduli, que se encuentra cerca de los parques nacionales del lago Manyara y de Tarangire. Laizer nos explica que su nombre «también es el término que se utiliza para hacer referencia a la taza grande que utilizamos [los masáis] para beber sangre o sopa. Se dice que quienes reciben este nombre son personas generosas que reparten la sangre o la sopa».
Cuéntanos un poco sobre tu vida, ¿cómo llegaste a convertirte en un guía de safari para Tanzania Specialist?
Mi nombre cristiano es Joseph, pero mi nombre tribal es Loti, así es como me conocen en la aldea. El resto del mundo me conoce por mi apellido, Laizer, del que me siento muy orgulloso y, personalmente, prefiero que se me llame así.
En lo referente a mi trabajo, llevo 15 años siendo guía, pero solo tres trabajando con Tanzania Specialist. Ahora mismo, me encargo de los visitantes del Parque Nacional del Serengueti. Lo que más me gusta hacer durante los safaris es centrar la atención en el comportamiento y la psicología de los animales. Intento leer su lenguaje corporal y descifrar su estado de ánimo: ¿se alegran de vernos? ¿Podemos acercarnos o es preferible que nos mantengamos alejados?
¿Qué más nos puedes contar sobre los animales albinos que has visto?
Llevo muchos años trabajando como guía, aun así, la primera vez que avisté un animal albino fue hace siete años. En total, he visto un cocodrilo albino en el lago Victoria, que fue mi primer avistamiento de este tipo, una cría de elefante, una jirafa, un búfalo y un eland, en el Parque Nacional de Tarangire, en distintas ocasiones, y, hace poco, tres babuinos albinos en el Parque Nacional de Arusha.
Para mí, la experiencia más especial fue cuando vi al búfalo, ya que nunca me había imaginado a esta especie con esta condición. No obstante, lo vi en dos ocasiones, una en Tarangire y otra en el cráter de Ngorongoro, aunque creo este último debía su color a la edad. Los animales albinos no solo tienen un pelaje blanco, sino que, la mayoría de las veces, también tienen ojos blancos o rojos y piel blanca. El que vi en Ngorongoro tenía un pelaje blanco grisáceo, similar a las canas que le nacen a las personas, mientras que el de Tarangire era muy distinto. Otro animal que me sorprendió bastante fue la cría de elefante, pero, desgraciadamente, hace bastante tiempo que no se le ha vuelto a ver.
¿A qué desafíos se enfrentan los animales albinos en la naturaleza?
Al igual que las personas albinas, su piel es muy sensible a la luz solar. De hecho, es muy probable que la cría de elefante tuviera algún tipo de problema con el sol, puesto que no dispone de pelaje que le sirva como protección. Por regla general, los animales albinos no llegan a la vejez, ya sea por la sensibilidad de su piel o porque sus colores no les permiten esconderse de los depredadores como es debido.
¿A qué crees que se debe el aumento de animales albinos en la actualidad?
No cabe duda de que uno de los principales motivos es que hay mucho más turismo. Más guías y más visitantes significa más movimiento y más posibilidades de avistar un animal peculiar y de que se corra la voz, despertando el interés de otras personas. Otra razón es que, aparentemente, la población de animales albinos en Tanzania ha aumentado debido a que los corredores de migración de los animales se han ido cerrando poco a poco en los últimos años.
Hay un corredor que va de Tarangire y el lago Manyara a Monduli, Longido y el Parque Nacional de Arusha, y de ahí al Parque Nacional de Nkomazi y el Parque Nacional de Amboseli, en Kenia. Las aldeas bloquean partes de ese corredor, por lo que los animales quedan atrapados en una zona. Esto ha provocado la endogamia a lo largo de los años. Como el albinismo es genético, lo más probable es que esto provoque un aumento del albinismo. Aun así, creo que la población de animales albinos sigue siendo de un 1 % y, además, está repartida por los diferentes parques, lo que dificulta considerablemente los avistamientos.
Ver un animal albino en persona es una experiencia inolvidable. ¿Qué consejos darías a las personas que viajan a Tanzania para que intenten avistar uno?
Sinceramente, lo primero que diría a las personas que estén interesadas en ver un animal albino es que ¡es muy probable que no vean ninguno! Aún no existen muchos ejemplares y es casi imposible saber dónde están con exactitud. Si tuviera que dar una estimación, diría que hay un 0,005 % de posibilidades de ver uno. Por ejemplo, en el Parque Nacional de Arusha hay tres o cuatro babuinos albinos. Se han visto en las zonas de los lagos y en el bosque, pero hay entre veinte y cuarenta kilómetros de terreno entre esas dos zonas.
No obstante, los recientes avistamientos de los babuinos en el Parque Nacional de Arusha y de la cebra en la Gran Migración después de cruzar el río, indican que están moviéndose y que podría ser el mejor momento para verlos. De hecho, hace cinco días uno de mis compañeros de trabajo vio una jirafa albina en el Serengueti y el búfalo de Tarangire se ha vuelto a ver también hace poco. Así que, ¡es posible que nuestros clientes tengan suerte!
¿Qué dices? ¿Te animas a hacer tu propio safari con uno de nuestros guías profesionales? Ponte en contacto con nuestro equipo y empieza a planificar tu viaje de ensueño.